El buen tiempo ya esta llegando y con ello los insectos y la enfermedad que pueden afectar los vegetales que en esta época comienzan a florecer.
Con el aumento de las temperaturas estos pequeños colonizadores encuentran las condiciones ideales para vivir y reproducirse, que es los más normal, hasta que no llegan a ser un grave problema para nuestras cosechas.
El primer paso para frenar una plaga es conocerla, por lo que a continuación vamos a hacer un listado de las plagas y enfermedades más comunes, con el fin de luchar contra ellas cuando vemos que nuestro huerto empieza a sufrir por sus llegadas.
MOSCA BLANCA: Muy fáciles de reconocer por ese color blanquecino tan característico. Se suelen instalar en las partes atrás de las hojas de los cultivos. Los daños más frecuentes que suelen causar son el amarilleamiento e incluso la caída prematura de las hojas, por picaduras directas en las mismas. Los cultivos más importantes que suelen verse afectados por mosca blanca son, entre otros, el del tomate, la judía, el pimiento, la cebolla, el calabacín, la zanahoria y la col.
Es una de las plagas más difíciles de combatir puesto que si no actuamos cuando empecemos a ver los primeros ejemplares, no podremos acabar con ellas.
PULGÓN: Posiblemente sea el parásito más conocido. Hay muchas especies diferentes, pero todas se caracterizan por tener un pico succionador-chupador con el cual perforan las hojas y los tallos de las plantas para alimentarse de la savia. Es común su asociación con hormigas, que se alimentan de una sustancia azucarada que segregan los pulgones (melaza), de modo que, observar hormigas en alguno de nuestras hortalizas, será una señal muy clara de que la hortaliza en cuestión está afectada por pulgón. En cuanto a los daños que puede causar, podemos destacar la deformación o enrollamiento de brotes y hojas. Los cultivos más importantes que suelen verse afectados por plagas de pulgón son: la judía, la col, la patata, el guisante, las habas y la vid, entre otros. Es por ello que cuando empecemos a ver 2 o 3 pulgones sobre nuestras plantas actuemos rápidamente pues los pulgones son capaces de parir crías idénticas a la madre (clones). Este proceso se conoce como partenogénesis.
ARAÑA ROJA: Con los primeros aires calientes que provocan que nuestra huerta se seque un poco, empieza a aparecer la araña roja. También conocida por su nombre científico Tetranichus urticae, este insecto de pequeño tamaño se puede distinguir a simple vista porque se instalan, principalmente, en el envés de las hojas. Sus daños son reconocibles cuando empiezan aparecer manchas o puntitos amarillentos en las hojas. Entre la plantan que afectan esta plaga están árboles frutales y plantas de jardín, como por ejemplo la patata, la judía, la calabaza o el almendro.
TRIPS: Los trips, de la orden de los tisanópteros, son unos pequeños insectos de pocos milímetros de tamaño. Son chupadores que se sitúan en el envés de la hoja, alimentándose de la savia de las plantas, debilitándolas lentamente. En general, no es una plaga demasiado grave. El mayor problema asociado a este insecto es que transmiten una enfermedad vírica bastante grave que afecta la planta del tomate, de ahí su nombre “virus del bronceado del tomate”. Así, los cultivos más afectados por el trips y por el virus que transmite son la tomatera, la judía y loa berenjena.
CARACOLES Y BABOSA: Los caracoles y las babosas son moluscos, primos de los mejillones o las almejas, pero en este caso terrestres y comedores de plantas. Se caracterizan por poseer un cuerpo blando, recubierto de una mucosa y esqueleto externo. Provocan agujeros y mordeduras en las hojas y son fácilmente identificables, porque dejan un líquido mucoso que al secar se adquiere un aspecto brillante. Salen cuando el tiempo está húmedo, después de una lluvia y son tan voraces que en muchas zonas son una de las plagas principales de los cultivos de hoja. Entre ellas están las lechugas, los coles, las espinacas y de algunos de fruto, como por ejemplo las fresas o los guisantes.
OIDIO Y MILDIU: Estos hongos pueden ser muy dañinos si no los prevenimos cuando el tiempo cambia bruscamente la temperatura, hay rocío o simplemente cuando regamos y mojamos las hojas de las plantas. La diferencia entre el oídio y el mildiu es muy sencilla, ya que el primero produce manchas blancas en la superficie de las hojas y las manchas del mildiu son amarillas en la superficie y blancas en el envés. Ambos hongos pueden afectar a una gran variedad de plantas de jardinería como: begonias, crisantemos, claveles, rosas, dalias.
También a plantas cultivables, como pueden ser las cucurbitáceas (melón, sandía, pepinos, calabazas), a la vid, melocotoneros, tomate, marihuana, patatas, etc.
VIRUS DE LA PATATAS: Su principal síntoma es la aparición de un color negruzco en los nervios de las hojas, lo que indirectamente afecta al crecimiento del tubérculo por dificultades en el proceso de fotosíntesis. Entre los insectos responsables de la enfermedad, protagonistas esenciales son los pulgones verdes del duraznero.
El virus tarda entre 24 a 48 horas en ser transmitido por estos minúsculos animales, porque primero circula por el sistema digestivo de estos y después sale por sus glándulas salivales. Además de la patata, afecta también al tomate y al pepino.
Estas son solo alguna de la plagas en Barcelona que pueden afectar nuestros huertos o jardines, pero me gustaría concluir este articulo con una reflexión: ¿qué serian estos espacios naturales, donde explotan todos tipos de colores y de olores sin sus pequeños habitantes que son parte integrante del gran espectáculo de la naturaleza?
Entonces si vemos insectos no quiere decir que tengamos una plaga, normalmente de darás cuenta si lo es, cuando encontraras una abundante aglomeración del parasito en cuestión y notaras que el crecimiento de las plantas afectadas no es natural.
Por esto no debemos preocuparnos demasiado, la naturaleza es sabia y sabe ella sola como gestionarse.
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